Consistía en mandarnos mensajes de texto al celular en la madrugada, ya que no había mejor forma de obligarte a pensar en alguien que interrumpiendo su sueño.
Y cada noche, al momento justo de irme a dormir ponía mi despertador un poquito antes de las 3am, muchas veces no lo escuchaba, pero cuando lo hacía, me apresuraba en enviarte un mensaje que siempre empezaba de forma alarmante: ataque de zombies, terremotos, meteoritos, invasión extraterrestre, invasión reguetonera, cualquier cosa que llamara tu atención y te hiciera enojar por interrumpir tu sueño. Después te decía algo bonito, me burlaba por haberte ganado y regresaba a dormir.
Curiosamente no puedo recordar qué decían tus mensajes cuando ganabas...
En ese entonces yo creía amarte, digo, sacrificar mi preciado sueño por ti, es demasiado para mí.
Fue muy divertido mientras duró, mientras pudiste ocultarme que estabas comprometido.
Eres un verdadero idiota, pero de verdad extraño nuestro juego.
¡Qué lindo juego! Lo aplicaría pero seguro si lo despierto se va a mega emputar... también aprecia mucho sus horas de sueño, quizá no me ame.
ResponderEliminarEn secundaria yo solía llamarle a mi novio en la madrugada para charlar, varias veces lo desperté de su sueño y él no me decía nada, amaba hablar conmigo; pero un buen día contestó su hermano y me regaño por despertarlo y no respetar sha la la laa.... me enojé con él y le dije que no se metiera... aún así, mi novio nunca volvió a contestar el teléfono en la madrugada. Ai, ai.. estos recuerdos...
Sniff sniff
YoSabina
Sí!
ResponderEliminarQué lindo.
y qué idiota ¬¬